Menuda
tarea me ha tocado hacer en este día,
congratular
a una hermosa joven septuagenaria
yo,
que sin ser un poeta, cualquiera
imaginaría!
poetisa
dama, de la cumbres andinas originaria.
Mujer
de una aquilatada experiencia literaria
paciente
amiga, a quien aprecio con el alma
de
espíritu libertario, condición protestataria
con
gran humor, poseedora de mucha calma.
¿Si
es posible llegar a conocer a una persona
sin
que haya podido contactar en un abrazo?
Los
admirables sentimientos con que razona
¿no
son suficiente razón de simpatía acaso?
Apropiadamente
lleva por nombre: Emérita
y
continúa enseñando a mejorar el español
si
la hubiera visto en su condición pretérita
la
disfrutaría como hago con el basquetbol.
Ah,
mi hermosa dama! ...achinada señora,
te
ofrezco de todo corazón mis parabienes
distinguida
profesora, recibe en esta hora
lo
humilde que han producido mis sienes.
©
Hernán Antonio Núñez
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