Después de San
Ramón llegó Septiembre
perezoso, nublado
y cansón;
el mes de las
cachamas sabaneras
que con juvas se
pescan y arpón.
Maduraron los rojos
anoncillos
en las cuevas de
los árboles carcomidos
los patos yaguazos
están poniendo
y celosos babos en
sus nidos.
Foto cortesía de Vivencias llaneras del abuelo |
El verano de
agosto como siempre,
cosa rara, este
año no llegó;
más en los días
primeros de septiembre
como que al fin,
al fin se presentó.
Detuvieron las
aguas sus crecientes
y está en apogeo
el chicuacal,
los gallitos
celosos en sus nidos
cantan
revoloteando en el pajal.
Septiembre es otro
mes pesado
para el llanero que
deleita es el verano,
mientras el
veguero goza en esos meses
el llanero sufre
por sus marranos.
Se los azotan los
royones y chispitas
cuando los inverna
en médanos aislados,
quedan ciegos y
abortan las marranas
y de flacos mueren
empestados.
Septiembre, el mes
que la torituga
está más gorda con
huevos en tomate;
el manatí está
henchido de gordo
grandes fiestas
hace el veguero cuando mata.
Fuente: Vivencias Llaneras del Abuelo
Almanaque Llanero
Autor Jorge Plaz
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